En medio de la incertidumbre y el miedo, nos preguntamos si esta crisis traerá, al menos, algo bueno. Necesitamos aferrarnos a noticias positivas que contrarresten el desaliento generalizado. Hay quien afirma que esta crisis está siendo buena para la naturaleza.

¿Realmente el coronavirus es bueno para el medio ambiente?

Greenpeace UK se ha pronunciado al respecto.

Y su opinión nos cae como un jarro de agua fría: no. La crisis del coronavirus no nos dejará un aire más limpio y un planeta más verde.

Así lo afirma John Sauven, director ejecutivo de Greenpeace en Reino Unido.

Pese a noticias alentadoras como la disminución de la contaminación en los canales de Venecia, los animales ocupando las calles de las ciudades y los gráficos que reflejan curvas descendentes de contaminación en el aire en las ciudades donde se han aplicado medidas de confinamiento (que nos han llevado a pensar que el coronavirus es bueno para el medio ambiente), Greenpeace alerta de que no deberíamos engañarnos.

Los efectos positivos serán de corta duración

Entre los motivos que sustentan esta aseveración, el principal está muy claro: los beneficios derivados del parón en la producción se revertirán en cuanto se retome la actividad. Parar la producción es una medida puntual, no duradera ni sostenible.

¿Cómo podemos saberlo? Ya se está viendo cómo en China las autoridades han empezado a «relajar» sus políticas sobre contaminación de automóviles y los permisos para abrir nuevas plantas de carbón.

El ecologismo aboga por medidas políticas sostenibles

La organización ecologista nos recuerda que ningún tipo de desastre natural, económico o sanitario nos va a regalar un mundo más verde mientras no exista la voluntad política de poner en marcha un plan global en el que los países se unan en un esfuerzo común.

Construir los cimientos de una economía más fuerte y saludable debería ser la prioridad en esta crisis. Sauven apunta a medidas como:

Y tú, ¿estás de acuerdo?