Alrededor de medio millar de palmeras de los montes de Dunas de Guardamar y Elche han tenido que ser eliminadas mediante el uso de máquinas retroarañas debido a su afección por los ataques del Picudo Rojo. El Picudo Rojo es una de las variedades de insecto más agresivas que existen actualmente para las palmeras, su efecto suele ser letal provocando por lo general, la muerte de las palmeras. La mayor parte de las palmeras afectadas pertenecían a la especie Phoenix dactylifera. Después de que las retroarañas hayan eliminado el mayor nucleo de palmeras afectadas, ahora arranca la lenta fase de eliminar los ejemplares dispersos por todo el monte. Se tiene previsto que los trabajos se prolonguen durante el mes de noviembre y según la Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente de la Generalitat la inversión será superior a los 36.000 euros.
Estas acciones tienen el objetivo final de erradicar la totalidad de los ejemplares de palmáceas afectadas por la plaga del mosquito, al mismo tiempo que también se aprovecha para eliminar los ejemplares de palmeras secas. Se trata de una acción necesaria para frenar la expansión de la plaga por la zona y evitar así que llegue a infectar a las palmeras de los terminos municipales más próximos como los de Elche y Guardamar del Segura.
El uso de las retroarañas es imprescindible ya que en los montes afectados no existen caminos, la mayoría son zonas de dificil acceso para el resto de maquinaría. La eliminación de las palmeras se está efectuando mediante el triturado ‘in situ’ de los ejemplares afectados.
Una vez que hayan concluido las labores de eliminación de la plaga y que los expertos garanticen que no hay peligro para las especies palmáceas, se estudiará la posibilidad de llevar a cabo trabajos de reforestación en la zona. Por lo que el uso de las retroarañas está más que asegurado en el territorio.